Contar con redes de trabajo sólidas con los distintos actores e instituciones locales del ámbito cultural.
Disponer de recursos para la formación y el asesoramiento de emprendedores culturales.
Consolidar un ámbito de participación y coordinación abierto y democrático.
Garantizar que la interacción y el intercambio cultural trasciendan el ámbito local.